El Pueblo Mágico de Tequisquiapan, celebró el Día de Reyes con una experiencia que combinó enoturismo y gastronomía en una de las regiones más icónicas de México.
La celebración, tuvo lugar el pasado 6 de enero en el restaurante Cilantro y Perejil, donde se ofreció un maridaje para resaltar los sabores de la cocina internacional, finalizando con uno de los postres más emblemáticos entre las costumbres mexicanas.
Como parte de la experiencia, los viñedos Freixenet ofrecieron una cata guiada que exploró los matices de los vinos locales. Este recorrido refuerza a Tequisquiapan como un destino clave en el enoturismo mexicano.
En colaboración con la Dirección de Turismo de Tequisquiapan, el evento formó parte de la clausura de la primera villa navideña de la región, que durante semanas atrajo a visitantes con su ambiente festivo, nevadas artificiales y espectáculo de luz y música.
“Estamos comprometidos a posicionar a Tequisquiapan como un destino cálido y vibrante, donde la cultura y la gastronomía se encuentran para crear momentos inolvidables” afirmó Katherine Arteaga Mejía, Coordinadora de Promoción Turística de Tequisquiapan.
Además de poner en alto la gastronomía y enología queretana, eventos como este fortalecen el interés del turista por explorar los rincones del estado a través de sus sabores.