Independientemente de la época del año, Nueva Orleans, Luisiana, recibe a sus visitantes de gran manera para vivir el encuentro de culturas caribeña, española, francesa y africana.
En la cuna del jazz, es fácil encontrar música por doquier, personas que viven para comer y todos los días son de fiesta; también podrán disfrutar la gastronomía criolla, observar robles españoles de siglos de antigüedad y escuchar el repiqueteo de los tranvías.
Con una mezcla de vida urbana, recorridos por los pantanos, Historia y festividades durante el Mardi Gras, Nueva Orleans tiene la fórmula para cautivar a viajeros de todo el mundo.
Los tranvías de St. Charles Avenue, Canal Street o Riverfront permiten explorar la ciudad de más de 300 años dividida por el Río Mississippi, rodeada de lagos, pantanos y bahías.
La arquitectura se percibe en más de 20 distritos históricos, más que en cualquier otra ciudad en Estados Unidos.
Un imperdible es la St. Louis Cathedral, que data del siglo XVIII, así como los clubes de jazz y blues, como el Preservation Hall o el Spotted Cat.
