Además de su calidad hospitalaria, el estado ha cautivado a un gran número de viajeros gracias a un fenómeno natural cautivador: sus playas bioluminiscentes.
Este espectáculo, donde las olas del mar emiten destellos de luz, principalmente de color azul o azul verdoso, es causado por microorganismos marinos (como bacterias, hongos y algas) que generan luz mediante una reacción química.
Los viajeros que deseen testificar este fenómeno encontrarán en Nayarit tres rincones costeros para admirar la belleza de la luz en el mar: Bucerías, Chacala y Los Ayala.
Bucerías: El Espectáculo Resplandeciente de Riviera Nayarit
Ubicado en el municipio de Bahía de Banderas, el pueblo costero de Bucerías es un imán para viajeros globales. Según los pescadores y pobladores, la mejor temporada para ver la bioluminiscencia es de agosto a diciembre, cuando las olas se transforman en un lienzo resplandeciente con miles de destellos.
Chacala: Intimidad y Esplendor en un Rincón Pesquero
Este tranquilo pueblo pesquero en el municipio de Compostela, es otra joya escondida. Es ideal para quienes buscan una experiencia más íntima y menos concurrida. Cuando la luna se oculta, las olas de Chacala se iluminan con el brillo de los microorganismos marinos, creando un increíble espectáculo de luz.
Los Ayala: Destellos Hipnóticos en la Bahía de Jaltemba
Es uno de los tres pueblos que conforman Rincón de Guayabitos y se distingue por su kilómetro de arena dorada y aguas color turquesa. Aquí, la bioluminiscencia emerge en las olas durante las noches, especialmente entre abril y diciembre, ofreciendo un espectáculo visual hipnótico.