El otoño en Colorado se convierte en un espectáculo natural que atrae a viajeros de todos los perfiles. Las montañas se tiñen de dorado con los álamos, los picos nevados enmarcan paisajes de ensueño y el aire fresco invita a explorar cada rincón del estado.
Para los amantes de la naturaleza, el Mountain Village Gondola en Telluride brinda vistas panorámicas gratuitas, mientras que el tren histórico de Leadville recorre paisajes montañosos con relatos mineros.
El Bighorn Sheep Canyon ofrece rafting y avistamiento de fauna, y las reservas de Arapaho y Pawnee son ideales para senderismo y observación de aves.
Fort Collins se posiciona como el destino pet-friendly por excelencia. Con eventos como el Tour de Corgi, alojamientos dog-friendly y cervecerías que reciben a mascotas, es el lugar perfecto para compartir el viaje con tu compañero peludo.
Los festivales otoñales enriquecen la experiencia: desde el Poudre Pour en Windsor hasta el Telluride Horror Show, pasando por el Breckenridge Craft Spirits Festival y el Miners Pumpkin Patch en Colorado Springs. Además, el Oktoberfest en Breckenridge celebra la tradición bávara con música, gastronomía y cerveza artesanal.
La cultura local se vive en los Farmers’ Markets de Alamosa y Montrose, donde se puede cosechar fruta en granjas “u-pick”. Y para los amantes del esquí, el Purgatory Resort inaugura su 60ª temporada el 22 de noviembre con más de 100 pistas.
