En la enigmática tierra del tequila se cultiva otra joya líquida que sobresale por su calidad y sabor. Para demostrarlo, se alista el primer “Festival del Vino de Los Altos de Jalisco”.
Del 3 al 12 de agosto, el pintoresco Jalostotitlán, en la Región Altos Sur, será el punto de encuentro donde los amantes del vino podrán disfrutar de la primera edición de este festival que busca acercar la grandeza de la vid a la región, al estado y a México.
En el mes de mayo, Jalostotitlán se unió a la llamada Ruta del Vino en el estado, conformada por los municipios de Guadalajara, Tuxcueca, Chapala, Lagos de Moreno, Unión de San Antonio, Encarnación de Díaz y Valle de Guadalupe. En todos ellos ya se cuenta con producción vinícola con buena calidad y reconocimientos nacionales e internacionales.
Es así como nació la entusiasta iniciativa para llevar a cabo el “Festival del Vino de Los Altos De Jalisco”. Será una oportunidad para conocer y explorar los vinos de las casas vinícolas participantes, vivir la experiencia de una vendimia, las catas, y los recorridos en los viñedos.
Las actividades programadas para la primera edición del festival comenzaron el pasado sábado 3 de agosto, con una increíble inauguración y cenas maridajes en restaurantes sedes, como el popular establecimiento “Mi tierra”.
Para el sábado 10, se realizará la inauguración (corte y pisa de la uva) de las Fiestas de la Vendimia 2024 del Viñedo Cerca Blanca, dónde habrá catas de vino, un concierto a cargo del músico tapatío Ricardo Caballero, fuegos artificiales y la entrega de las medallas de oro de los vinos premiados de Viñedo Cerca Blanca a la Secretaria de Turismo del Estado de Jalisco.
El domingo 11 se llevará a cabo la “Expo Festival del Vino de Los Altos de Jalisco”, en la Plaza Alfredo R. Placencia de las 10 de la mañana a las 10 de la noche con música en vivo. Iniciando nuevamente la semana, el lunes 12, tendrá lugar el encuentro de empresas vinícolas de los Altos de Jalisco en las instalaciones del Hotel Gralta, dando fin a esta magna fiesta de la vid.
La combinación de paisajes extraordinarios, majestuosas haciendas y bodegas familiares llenas de vinos de calidad excepcional, hacen de este rincón jalisciense un destino imperdible para los amantes del enoturismo en México y más allá.
