La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) ha solicitado a las partes involucradas en conflictos laborales en el sector aéreo, que estos sean resueltos sin afectar al viajero.
Esta semana, miles de pasajeros se vieron impactados en distintos lugares de Argentina, después de que trabajadores de una empresa de ground handling adoptaran medidas de fuerza en los dos aeropuertos de Buenos Aires – Ezeiza y Jorge Newbery.
Dichas prácticas de paralización o ralentización como medida de fuerza, que han venido afectando el servicio esencial de transporte aéreo en más de una oportunidad en el último tiempo,perjudican a los miles de personas que necesitan movilizarse.
Por si fuera poco, la suspensión de operaciones y falta de diálogo en la resolución de estos desacuerdos afecta seriamente la imagen del país sudamericano, el turismo y su economía.
Estas movilizaciones desvanecen todos los esfuerzos que se vienen realizando para fomentar la competitividad aérea en la nación y con ello la industria turística, con los beneficios que produce a todos sus habitantes.
No hay que olvidar que “la aviación es un medio de transporte esencial para la conectividad y el desarrollo social y económico de la Argentina”, puntualizó la IATA en un comunicado.