La CANAERO emitió un comunicado exponer su postura ante la iniciativa que busca reformar la Ley de Aviación Civil y la Ley de Aeropuertos al permitir el cabotaje en México.
Conformada por 45 miembros, entre aerolíneas, empresas cargueras, taxis aéreos y prestadores de servicios, la Cámara Nacional de Autotransportes, alertó sobre los riesgos que amenazarían a la industria, de aprobarse dicha iniciativa.
Esta, afirman, carece de sustento legal y análisis de prácticas internacionales, así como de estudios avalados por expertos. “En resumen, no contiene elementos serios y fundados que demuestren el beneficio público para los mexicanos”, se lee en el documento.
Añadieron que los países que permitieron el cabotaje sin estudios ni estrategia como se sugiere hacer en México, “perdieron a sus aerolíneas y empleos, generando una crisis de conectividad y competitividad de dimensiones desastrosas”.
Asimismo, explicaron que México es uno de los países mejor conectados a nivel doméstico, por lo que no existe una necesidad real de que aerolíneas extranjeras operen conexiones entre destinos nacionales.
Tan solo en 2022, las aerolíneas nacionales atendieron 220 rutas domésticas en todo el país. Por lo que destacaron, no hace falta conectividad, sino visión de futuro basada en estudios e incentivos que reconozcan y fortalezcan las capacidades de los mexicanos.
En pocas palabras; si se permite a líneas extranjeras operar rutas nacionales, estas necesitarían atender las rutas más rentables.
Al inicio, subrayan, los precios al consumidor serían bastante atractivos. Posteriormente tomarían el control de estas y se verían forzadas a incrementar los costos para recuperar las pérdidas que les haya generado su ingreso.
Con el cabotaje, las aerolíneas extranjeras tributan en sus propios países. Esto, ocasionaría una merma en la recaudación de impuestos y en consecuencia los recurso para hacer frente a servicios públicos que están a cargo del Estado.
Así, una aerolínea del Estado, tendría que ser subsidiada con los impuestos de los mexicanos para poder conectar destinos que “no son, ni serán rentables”, aseguran.
La Cámara, enfatizó además en la urgencia de disminuir las tarifas aeroportuarias que pagan los viajeros, ya que México tiene los impuestos más caros de América Latina y el mundo.
Este último punto, sobresale como medida para ofrecer tarifas más asequibles a los viajeros.