Una semana después de que el director ejecutivo de Norwegian Cruise Line Holdings dijera que podría trasladar barcos fuera de Florida si el estado le impide exigir pruebas de vacunación a los pasajeros, el gobernador Ron DeSantis redobló su compromiso con lo que él llama “privacidad médica”.
“Si no podemos operar en el estado de Florida por cualquier razón, entonces hay otros estados desde los que operaremos”, dijo el director de NCLH, Frank Del Rio. Por su parte, DeSantis sostuvo que La Florida respeta la privacidad médica de todos los floridianos y si alguna línea no quiere zarpar desde el destino, otra lo hará. DeSantis también atacó la guía reciente de los CDC que estipula que si los cruceros pueden demostrar que el 95% de los pasajeros y el 98% de la tripulación están vacunados, pueden lanzar cruceros más rápidamente, reiterando sus declaraciones anteriores de que los cruceros operan de manera segura en otras partes del mundo sin mandatos de vacunas.