En un acontecimiento histórico, el Aeropuerto de Brisbane se convirtió en el primero del mundo en completar con éxito la evaluación de seguridad bajo el nuevo programa global de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).
La obtención del más alto nivel de certificación en Sistemas de Gestión de Seguridad (SeMS), se dio como resultado de una visita in situ realizada en junio y una exhaustiva auditoría del enfoque del aeropuerto en materia de seguridad aérea, basada en prácticas internacionales.
Dicha evaluación se centró en seis componentes clave: Gobierno Corporativo, Gestión de Recursos, Gestión de Amenazas y Riesgos, Garantía y Control de Calidad, Gestión de Emergencias e Incidentes, y Documentación de Seguridad.
Entre los diferenciadores que facilitaron la distinción se encontró la participación del liderazgo ejecutivo en la seguridad operativa; la colaboración interfuncional entre todas las áreas de negocio; la innovación y mejora continua en procesos y procedimientos; además de la alineación con los estándares globales del Manual SeMS de la IATA.
“Ser el primer aeropuerto del mundo en someterse a esta evaluación refleja nuestro compromiso de liderar el camino en seguridad aérea y brindar una experiencia segura y confiable a los 24 millones de pasajeros que viajan a través de nuestro aeropuerto cada año”, compartió Gert-Jan de Graaff, director ejecutivo del aeropuerto.
El tercer aeropuerto más transitado de Australia será clave en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Brisbane 2032, por lo que además continúa su plan de modernización Future BNE, que implica una inversión de 5.000 millones de dólares e incluye mejoras sustanciales en los controles de seguridad de ambas terminales.
