Cuando se busca estar en contacto con la naturaleza pero sin sacrificar la comodidad, es momento de alojarse en un glamping, y el estado de la estrella solitaria tiene mucho que ofrecer.
Ubicado al noroeste de Dallas está Paradise Cove en Lake Grapevine, donde los visitantes podrán disfrutar de una experiencia privada en un lago desde la intimidad de una lujosa yurta y alquilar un bote para explorar el lago.
Al este de Dallas, Canton combina el glamping con una experiencia vintage que se remonta a los días de las carretas cubiertas en Texas. Al verdadero estilo de los pioneros del oeste.
Los Conestoga Wagons de Silver Spur Resort están escondidos entre los árboles y atraen un momento más simple, con todas las comodidades de una estadía de lujo.
Por su parte, Walden Retreats es un oasis privado de 38 hectáreas en el Hill Country, famoso por redefinir la experiencia al aire libre en lujosas tiendas privadas estilo safari.