El ritmo de Jamaica se refleja desde sus colinas verdes hasta en las olas de sus aguas que varían en tonos de azul.
Respirar el aire fresco de la montaña, jugar en las olas, descubrir el poder de las flores terapéuticas o admirar criaturas exóticas, son solo algunos de los regalos de la naturaleza que aguardan en el destino.
Es posible encontrar cocodrilos asomándose por la superficie del agua en el Black River Safari en el sur, ascender Dunn’s River Falls al norte, tomar un tranquilo paseo en balsa por el Rio Grande hacia el este y explorar una veintena de piscinas naturales en Mayfield Falls al oeste. En Little Dunn’s River y Laughing Waters los visitantes podrán maravillarse al ver cómo desemboca un río en el Mar Caribe y pasar un delicioso día de playa.
La luz del sol durante todo el año y la tierra fértil dan lugar a una gran cantidad de vida vegetal en casi todas partes. Royal Botanical Gardens y Jardines Botánicos de Cinchona en St. Andrew; Zoológico Hope en Kingston; Jardines de Castleton en Santa María; Ahhh Ras Natango Gallery & Garden en Montego Bay son ejemplos de la naturaleza en su esplendor.
Jamaica, “El Latido del corazón” es la tercera más grande de las islas del Caribe y la de mayor tamaño de habla inglesa. Desde el glorioso amanecer cada mañana, hasta que el sol desaparece en el mar al atardecer, Jamaica presenta una magnífica paleta de colores, un caleidoscopio de belleza que hace de nuestra isla la joya más preciada del Caribe.
Cabe acotar que todos los visitantes a la isla requieren un documento de autorización de viaje, el cual debe solicitase en https://travelauth.visitjamaica.com dentro del período de siete días antes de la fecha prevista del viaje.
